China acelera en el ámbito de la conducción autónoma. El país asiático ha entrado en la fase de producción masiva del Apolong, un minibús eléctrico autónomo desarrollado por el gigante de las búsquedas por Internet Baidu. El vehículo, con capacidad para catorce personas, ya está operativo en diferentes zonas turísticas del país, incluida Pekín.

El Apolong puede recorrer cien kilómetros con una batería completa, que tarda algo más de dos horas en cargarse. Su velocidad punta es de setenta kilómetros por hora, aunque de momento se mueve a una velocidad que rara vez supera los treinta kilómetros por hora. Además, el vehículo únicamente se mueve a lo largo de rutas preestablecidas.

Baidu ha afirmado que el fabricante de autobuses King Long ya ha construido cien unidades del Apolong, después de haber certificado niveles satisfactorios de eficiencia y de seguridad. Estos minibuses pueden evitar obstáculos y frenar para prevenir accidentes, aunque nunca se desvían del camino programado.

El uso de un minibús de estas características sitúa a China en una posición de referencia en el ámbito de la conducción autónoma. No se trata sólo de prototipos que se prueban en circuitos cerrados, sino vehículos que operan en condiciones reales.