China crea nuevas funciones para sus gafas de reconocimiento facial. A principios de este año, el país asiático comenzó a implementar en sus cuerpos policiales unas gafas equipadas con cámara y sistema de reconocimiento capaz de escanear los rostros de los habitantes del país. Sus nuevas funciones permitirán que la policía pueda escanear a los viajeros y controlar quién entra en el territorio.

El objetivo del Gobierno chino pasa por conocer instantáneamente los detalles de cada una de las personas y detectar posibles sospechosos. Inicialmente, las gafas se crearon para detectar a aquellos pasajeros de tren en Zhengzhou que entraran con tarjetas de identidad falsas.

China está conforme con el resultado de estos dispositivos y ya ha iniciado un nuevo despliegue en la periferia de Pekín. Otros departamentos de policía de otras regiones en el país recibirán estas gafas como parte de su nuevo equipamiento a lo largo de este año.

China repartirá sus gafas de reconocimiento facial a los diferentes equipos policiales del país

Esta clase de dispositivos pueden resultar muy útiles para la identificación en caso de búsqueda de criminales, no sólo en reconocimiento de personas, sino también de matrículas de coche, por ejemplo.

Las gafas son fabricadas por la compañía LLVision Technology, con sede en Pekín. Cada unidad cuenta con un precio que ronda los 700 dólares (565 euros), sin contar el dispositivo que se conecta a esta y que permite la comunicación en tiempo real con la base de datos de la policía.