Francisco Marín (Cdti): “La ciudadanía debe entender que la I+D+i es parte de todos”
El director general del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (Cdti) considera que es necesario poner los recursos necesarios para que la sociedad española entienda la importancia de la I+D+i.
Francisco Marín es el director general del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (Cdti), organismo dependiente de la Secretaría de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación. La trayectoria del directivo está estrechamente ligada al sector de la innovación: ha sido presidente del área de I+D+i de la patronal Ametic así como del Foro de Empresas Innovadoras, patrono de Cotec a título personal y vicepresidente de la Comisión de I+D+i de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (Ceoe). Licenciado en Ingeniería de Telecomunicaciones por la Universidad Politécnica de Madrid y con un PADE por Iese, Marín asegura que “el sector de la I+D+i es un sector joven”.
Pregunta.: Lleva más de una década vinculado al sector de la innovación, ¿podría hacer balance de cómo ha evolucionado en los últimos años?
Respuesta.: El sector de la I+D+i es un sector joven, como muchas industrias de nuestro país. En las anteriores revoluciones tecnológicas, España no se posicionó como punta de la transformación económica como el resto de países europeos. Ha sido una posición de arranque tardío, y esto nos ha condicionado mucho, pero a partir de 2000 empezamos a despegar de forma importante. Durante esos años, la inversión fue superior a la de algunos países del resto de Europa. Hicimos un ejercicio de comprensión e interiorización de lo que tenía que ser la I+D+i para que nuestro país creciera.
P.: ¿Qué ocurrió después?
R.: La crisis, tanto en el ámbito nacional como internacional, dio lugar a un frenazo y a un retroceso de la actividad. No obstante, durante los primeros años de la recesión económica, entre 2009 y 2012, observamos que las empresas estaban resistiendo bien el envite y mantenían tasas de inversión en I+D+i elevadas. Al alargarse la crisis, las compañías no tuvieron más remedio que realizar ajustes en este segmento y las cifras empezaron a decaer. Hoy, en 2017, aún estamos lejos de la cifra que hubiéramos querido obtener, pero el Gobierno ya ha puesto las bases para responder durante el próximo ciclo.
P.: El Gobierno ya habla de recuperación económica, ¿pero, por qué no remonta la inversión en I+D+i?
R.: Es necesario señalar que la destrucción del tejido empresarial ha sido muy importante; de hecho, actualmente existen muchos menos agentes que participan en la I+D+i. Desde que un empresario crea una empresa e invierte en I+D+i pasa mucho tiempo y si esta división se cierra, es muy costoso recuperarla.
“Existen muchos menos agentes que participan en la I+D+i”, comenta Marín
P.: ¿Qué otros factores influyen?
R.: Otros factores que influyen en esta tendencia, además de la destrucción de compañías, es el desequilibrio entre la inversión por parte de las grandes corporaciones y las pequeñas empresas. En España, las pequeñas y medianas empresas (pymes) soportan más del 50% de la inversión en I+D+i, mientras que en otros países europeos, este peso lo llevan las grandes corporaciones. Para que se produzcan saltos cuantitativos es necesario que las grandes empresas inviertan. No puedes pedirle a una compañía que factura un millón de euros que destine una cantidad relevante a I+D+i para que cambie la tendencia; pero una que facture 40.000 millones de euros sí que puede tomar decisiones relevantes. Por otra parte, una empresa no tiene la capacidad de invertir en I+D+i si ni tan solo puede generar beneficios. Las corporaciones están en un proceso de recuperación de los márgenes. Ahora bien, es cierto que existen síntomas muy importantes de recuperación económica, uno de ellos es la buena participación de las empresas españolas en el programa europeo Horizonte 2020.
P.: ¿Qué se puede hacer para que la inversión en el sector I+D+i remonte?
R.: Hay que incrementar la participación del sector público y, por ello, nuestra voluntad es cerrar acuerdos parlamentarios para que en los Presupuestos Generales del Estado exista una partida sostenida y creciente para la I+D+i. También es necesario que las empresas privadas obtengan resultados positivos y se comprometan al crecimiento de la inversión en I+D+i. España está más retrasada en la inversión privada que en pública. El tercer aspecto es que la ciudadanía entienda que la I+D+i es parte de todos, no sólo de expertos. Y para que esto ocurra, hay que poner los recursos.
P.: ¿Y por qué en España no se entiende?
R.: Porque somos malos comunicadores. Hablamos de unas palabras que los ciudadanos no saben qué significan. Nos pasa a casi todos los profesionales. Nos gusta hablar de lo que nosotros entendemos y no de lo que la gente debe entender. El trabajo de concienciación de una ciudadanía experta no se realiza en un año o dos, sino que hay que estar muy cerca de la gente para que lo entienda.
“La internacionalización es una labor absolutamente clave para las empresas españolas”, explica el directivo
P.: ¿Cómo ha cambiado el Cdti en estos años para adaptarse a esta situación?
R.: Hemos jugado un papel anticíclico y, en este sentido, hemos intentado suplir las deficiencias que tenían las empresas en I+D+i. Una de las medidas que hemos adoptado ha sido minorar las garantías exigidas a las empresas que presentan proyectos excelentes. Queremos que una compañía que tiene el balance perjudicado por la crisis pero cuenta con una buena idea, obtenga financiación. Otra medida que hemos llevado a cabo en el último año ha sido subir los tramos no reembolsables.
P.: ¿Qué ha aprendido el Cdti de la crisis económica?
R.: Es necesario realizar una labor más activa en asesoramiento. Que la gente que participa venga con un mejor enfoque de sus ideas. También hemos perfilado los instrumentos de financiación: hay muchos de ellos y es necesario que los empresarios tengan claro a qué programa deben acogerse. Hemos aprendido también que la internacionalización es una labor absolutamente clave para las compañías españolas. A día de hoy, las empresas de España exportan más que nunca.
P.: ¿Y cuáles son las asignaturas pendientes?
R.: Aún quedan muchas cosas por hacer pero lo más importante es conseguir que los emprendedores reconozcan al Cdti como un agente clave. Existe un segmento de jóvenes que tiene muy buenas ideas, pero aún no sabe que va a ser empresario. Es a ellos a quienes les tenemos que hacer llegar nuestro mensaje.
P.: ¿Considera que organismos como el Cdti pueden cambiar a la misma velocidad a la que evoluciona el sector digital?
R.: Sí. En el caso del Cdti, cuenta con una muy buena mezcla de lo que es el rigor del sector público y la flexibilidad del sector privado. Somos capaces de responder en plazos muy cortos. Hay una frase que me gusta mucho: “con estos ritmos que tenemos en los cambios tecnológicos, el acierto es equivocarse pronto”. Porque está claro que se van a equivocar. Hay que probar, y acertar o no, pero es mejor saberlo pronto para poder rectificar a tiempo.
P.: ¿Cree que la financiación extranjera puede menguar el papel de los inversores nacionales?
R.: Es un debate muy interesante, tanto unos como otros están totalmente mezclados. Llegan inmensas cantidades de capitales a España, no es un combate. Me felicito mucho porque todos los agentes tienen lugar aquí, el público nacional, el privado nacional, el público y privado internacional… El programa Horizonte 2020, por ejemplo, está siendo muy bueno para nuestro país. Nos estamos convirtiendo en tractores de fondos europeos para empresas españolas.