La presidenta de IBM en España reclama que cualquier impuesto a servicios digitales se coordine a escala europea

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La presidenta de IBM en España reclama que cualquier impuesto a servicios digitales se coordine a escala europea

Marta Martínez también ha abogado por que la inversión en innovación que realizan las empresas sea reconocida desde un punto de vista impositivo y esta se pueda recuperar.

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Coordinación entre países. Eso es lo que Marta Martínez, presidenta de IBM para España, Portugal, Grecia e Israel, ha reclamado a razón del anteproyecto de ley sobre el impuesto a determinados servicios digitales. La directiva ha incidido en que es importante que haya “coherencia a escala europea”.

“Creo que tiene que haber una normativa que, de alguna forma, esté coordinada a escala europea”, ha señalado Martínez en un encuentro con periodistas. Según la ejecutiva, IBM tiene “una vocación clara” de cumplir con el pago de impuestos en España, y ha asegurado que su objetivo es “seguir cumpliendo” con sus obligaciones fiscales.

Además, Martínez ha abogado por que la apuesta que hacen las empresas por la innovación sea reconocida desde el punto de vista impositivo y que las inversiones realizadas se puedan recuperar. “Que los gobiernos motiven la innovación y desde el punto de vista fiscal tenga realmente un impacto”, ha subrayado la directiva.

IBM ha presentado hoy su iniciativa por las tecnologías abiertas, que ayudan a dar una mejor respuesta a las necesidades de las empresas a la hora de abordar los procesos de digitalización. La compañía ha lanzado varias plataformas abiertas para la integración de entornos multicloud, ciberseguridad e inteligencia artificial.

Según las previsiones de IBM, la apuesta por estas tecnologías innovadoras supondrá el 50% de los ingresos en unos meses. También destaca el uso del blockchain por parte del grupo, que dispone de varios acuerdos en este ámbito, como Carrefour, que utilizará esta tecnología para trazabilizar productos frescos; El Corte Inglés, que empleará este sistema en su cadena de suministro; y Telefónica, a la que ayudará a gestionar las llamadas de roaming para evitar fraudes o conflictos entre operadoras.