Miquel Rutllant (Clúster Audiovisual de Cataluña): “La globalización del contenido es un reto para la industria”
El presidente del Clúster Audiovisual de Cataluña identifica cuatro retos principales para la industria audiovisual: la globalización del contenido, la innovación, la internacionalización y la atracción de talento.
Miquel Rutllant asumió en diciembre de 2017 la presidencia del Clúster Audiovisual de Cataluña, entidad que agrupa empresas e instituciones del sector audiovisual y multimedia como Agile, Cellnex, Filmin, Gestmusic o Zoopa. Director general de Lavinia desde 2012, Rutllant es ingeniero superior de telecomunicaciones por la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) y MBA de Iese. Con motivo de la celebración de la Setmana del Talent Audiovisual, certamen celebrado a finales de noviembre en el que participaron un centenar de empresas del sector audiovisual, Rutllant destaca el potencial del talento joven y constata la necesidad de que se creen equipos interculturales para promover la producción de contenido global.
Pregunta: ¿Qué le ha llamado más la atención durante la Semana del Talento Audiovisual?
Respuesta: El pitching. Los estudiantes de diferentes universidades de todo el mundo presentan sus proyectos audiovisuales ante los actores más relevantes de la industria. Estos son de una gran calidad, desde el contenido hasta el formato.
P.: ¿En qué destacan estos proyectos?
R.: Estamos hablando de talento joven, que hoy en día es escaso. Es necesario visibilizar a los nuevos profesionales, que a su vez son los nuevos telespectadores. El tipo de narrativa que utilizan, las historias… Es una tipología de contenido que actualmente demandan los telespectadores. Ideas nuevas, frescas, el modo de consumir este contenido, las plataformas qué utilizan… Los que formamos parte de la industria más tradicional queremos imaginar cómo hacerlo, pero no acabamos de tenerlo claro.
P.: ¿Qué nuevas oportunidades se abren para el sector audiovisual?
R.: El talento, que es muy potente, es una gran oportunidad porque la dificultad para encontrarlo es elevada. Para que el sector avance también se necesitan empresas innovadoras, que ya hay, y que sean internacionales, que están en ello. También es necesario asumir el reto de la transformación del sector audiovisual: venimos de un consumo más convencional de televisión y cine, y ahora hay que realizar un cambio importante hacia las nuevas plataformas.
“El contenido de autor y de proximidad tendrá continuidad, sino sería una pérdida cultural muy relevante”
P.: ¿Qué otros retos destacaría?
R.: Están ocurriendo muchas cosas al mismo tiempo: se consume contenido en plataformas que no son convencionales, sino que se han creado específicamente para un segmento de usuarios determinado. Crear contenido para estas plataformas es un reto importante. Otro reto: la globalización del contenido. Como industria acostumbrada a trabajar en mercados locales (hay algunas excepciones), es importante entender cómo producir un contenido global. Pero esto no quiere decir que la industria tradicional desaparezca: el contenido de autor y de proximidad tendrá continuidad. Si no, la pérdida cultural será enorme.
P.: ¿Cuáles son las palancas de cambio?
R.: Por la parte del talento, observamos que tanto Barcelona como Cataluña atraen a gente muy preparada y a empresas tecnológicas muy potentes. Creemos que puede ocurrir lo mismo en el sector audiovisual. Con los equipos interculturales surge la oportunidad de que sea más fácil producir contenido global. Por la parte de la internacionalización, es necesario incrementar la colaboración entre los distintos actores de la industria.
P.: ¿En qué sentido?
R.: El sector audiovisual, en contadas excepciones, está compuesto por pequeñas y medianas empresas (pymes), y para la internacionalización es necesario ganar tamaño. Y este tamaño sólo lo podemos conseguir juntándonos con gente de fuera, y no necesariamente por el contenido. Hay que atraer a empresas que nos enriquezcan y necesitamos mejorar en infraestructuras. A modo de ejemplo, Barcelona será una de las capitales del 5G y necesitará contenido adaptados a los nuevos anchos de banda.
“Los grandes operadores privados se convierten también en productoras”
P.: Antes ha dicho que la industria tradicional, como la televisión o el cine, no iban a desaparecer. ¿Qué papel deberían adoptar?
R.: Existen distintos nichos o tipología de contenidos que deben tener continuidad. Por ejemplo, es necesaria una televisión pública y potente, es un servicio público y de proximidad absolutamente necesario. Nuestro modelo cultural no puede prescindir de este tipo de cadenas públicas, donde se consume contenido local. Estamos viendo que los operadores privados consumen cada vez más contenidos producidos por multinacionales o por ellos mismos. Los grandes operadores privados se convierten también en productoras.
P.: ¿Y el cine?
R.: En el mundo del cine siempre existirá el cine de autor, en un ambiente más alejado del mainstream del contenido generado desde las factorías estadounidenses. Existen salas especializadas en las que emiten cine de autor, y el consumo es elevado. Tiene su demanda, van a convivir.
P.: Netflix, HBO y Amazon Prime Video continúan sumando usuarios. ¿Pueden llegar a crear un oligopolio?
R.: Hay muchas empresas y aún tienen cuotas relativamente bajas. También están Disney, que lanzará su propia plataforma, Comcast, Apple… El incremento de la competencia ha sido bastante importante. No sé cómo acabará, seguramente dependerá de cada país. Pero una mayor competencia puede provocar un aumento de la producción de contenidos, lo que a corto plazo es positivo.
P.: Un estudio de IAB Spain señalaba en 2017 que la inversión publicitaria en medios digitales podría adelantar a la de la televisión en los próximos tres años. ¿Está usted de acuerdo?
R.: Es plausible y como sector lo estamos notando. El mercado ha decidido que el modelo de los operadores privados europeos con gran dependencia de los ingresos publicitarios por televisión tiene fecha de caducidad. Que la inversión en publicidad se traslade de la televisión (donde hay un claro oligopolio) a los medios digitales (donde se produce una atomización) tiene un impacto muy relevante. Por eso estamos en este proceso de convertirnos en un referente del audiovisual europeo.