A falta de una semana para el arranque del Mobile World Congress 2018, las expectativas se encuentran en un punto intermedio. ¿Existe una novedad entre bastidores esperando a marcar un punto de inflexión en el sector? Se esperan updates de dispositivos y nuevas soluciones tecnológicas, cómo no, pero tampoco se descarta un verdadero golpe encima de la mesa.
Y es que a los hechos me remito. Las ediciones anteriores del certamen acogieron algunos de los anuncios más relevantes para la industria tecnológica. En 2007, por ejemplo, Microsoft aprovechó el marco del evento para dejar claro al mundo que quería conquistar el sector de la telefonía móvil con su sistema Windows Mobile (el resultado fue otro cantar).
Un año más tarde, Google acudió a la feria para presentar Android, el sistema operativo que nutre a la inmensa mayoría de smartphonesdel mundo. Ya ha pasado una década desde entonces y, desde luego, propuestas con tanto impacto como esa han quedado para el baúl de los recuerdos.
Samsung también aprovechó el certamen, en su caso en 2010, para hacer lo propio con su sistema operativo Bada, que más adelante fue sustituido por Tizen. Hablando de software, Microsoft se apoyó en el marco del congreso de 2012 para presentar oficialmente Windows 8.
En los últimos años, se han presentado infinidad de smartphones y una gran cantidad de herramientas relacionadas con tecnologías como la inteligencia artificial, realidad virtual y aumentada, Internet de las Cosas, big data y 5G, entre otras. Se han mostrado muchos avances en ese aspecto y se esperan grandes pasos hacia esa dirección en el evento de este año.
Pero, ¿habrá un verdadero hito? ¿A qué distancia estamos de un nuevo producto que impacte en el consumidor a escala masiva en el corto o medio plazo? Lo que lograron las redes sociales o los smartphones a la hora de transformar los hábitos de toda una sociedad pueden repetirlo algunas de las tecnologías nombradas, pero aún es pronto para ello. Difícil papeleta para estas demostrar todo su potencial para este Mobile 2018.