Abercrombie & Fitch sufre caída del 20% en el valor de sus acciones
Las principales empresas de moda en EE. UU. ajustan sus proyecciones de ventas mientras enfrentan reacciones mixtas del mercado, destacando las estrategias de Lululemon y Abercrombie.
En una reunión celebrada en Orlando, las principales empresas de moda de EE. UU. se han encontrado con inversores y analistas para discutir las últimas tendencias y perspectivas del sector. Entre los participantes, Lululemon y Abercrombie & Fitch han ajustado sus pronósticos de ventas para el cuarto trimestre, anticipando un crecimiento de ingresos del 7 al 8%, en comparación con la anterior previsión que oscilaba entre el 5 y el 7%.
A pesar de este optimismo en las proyecciones, la respuesta del mercado ha sido dispar. Mientras Lululemon ha experimentado una ligera mejora en su valor de acciones, la cotización de Abercrombie & Fitch ha sufrido una caída de más del 20%, con una pérdida de más de 30 dólares por acción. Este desplome ha sido atribuido por los analistas a las expectativas de un desempeño navideño más sólido de lo anticipado, lo que ha llevado a algunos a cuestionar la viabilidad de las estimaciones de ganancias.
El CEO de Abercrombie, Fran Horowitz, destacó en un comunicado que la estrategia de la empresa se centrará más en incrementar las ganancias a largo plazo, en vez de enfocarse únicamente en el aumento de ventas. Horowitz se mostró optimista, afirmando que tras dos años de crecimiento de dos dígitos en ingresos y ganancias, la compañía se encuentra en una buena posición para continuar desarrollando su modelo de negocio.
Para el año 2024, se espera que el crecimiento del ingreso total alcance un 15%, aunque se prevé que los niveles de crecimiento del año anterior, que fueron del 16%, no sean repetibles. Esto podría intensificar la incertidumbre entre los inversores, ya que las expectativas de crecimiento del 21% del año pasado están lejos de ser alcanzables.
En resumen, mientras Lululemon parece estar navegando con éxito en un entorno desafiante, Abercrombie & Fitch enfrenta una mayor presión en el mercado a pesar de sus perspectivas de crecimiento ajustadas. El enfoque en la rentabilidad a largo plazo podría ser un indicativo del camino estratégico que la industria de la moda está dispuesta a seguir en un futuro cercano.