Boeing espera aumentar la producción del B737 MAX a 38 aviones mensuales para 2025
Boeing investiga si los problemas del B737 MAX son por fallas de mantenimiento, mientras enfrenta pérdidas millonarias y una intensa competencia de Airbus.
En medio de una profunda crisis, Boeing se encuentra investigando si los problemas del B737 MAX provienen de fallas en el mantenimiento y no del fabricante. Este hallazgo podría cambiar notablemente la percepción sobre la compañía en Seattle. La expectativa es que, para el año 2025, Boeing logre aumentar su producción a 38 aviones B737 MAX mensualmente, siempre y cuando obtenga la aprobación de la Administración Federal de Aviación (FAA).
A pesar de los efectores esfuerzos, la compañía reportó una pérdida de 5 mil millones de dólares en el tercer trimestre de 2024, evidenciando la seria situación económica por la que atraviesa debido a problemas de calidad en modelos como el B737 MAX y el B787 Dreamliner. Ante esto, Boeing ha prometido ser más transparente y a colaborar proactivamente con la FAA y otros reguladores para mejorar la calidad de sus aeronaves.
Asimismo, la empresa enfrenta una intensa competencia de Airbus, que ha tenido éxito con sus modelos A350 y A321neo. En un esfuerzo por mejorar la producción, Boeing ha adquirido Spirit Aerosystems y anticipa que esta reestructuración optimizará su cadena de suministro, aunque continuará bajo la vigilancia de la FAA.
La falta de componentes y los efectos duraderos de la pandemia de COVID-19 también están afectando la producción. En una medida para ajustar su estructura, Boeing planea despedir al 10% de sus 170,000 empleados, es decir, alrededor de 17,000 personas. Expertos consideran que esto es parte de un necesario reset en la gestión de Boeing, que debe también transformar su relación con los denunciantes, quienes deberían ser premiados por alertar sobre cualquier controversia en lugar de ser castigados.
Los pasados problemas de calidad y conflictos laborales han llevado a un crítico estado financiero. Si Boeing desea recuperar la rentabilidad, necesita regresar a la producción de 38 aviones B737 MAX mensualmente, lo cual depende de la aprobación de la FAA.
Sin embargo, la compañía no verá un retorno al impulso financiero inmediato, ya que el lanzamiento del B777X se ha retrasado hasta 2026, frustrando aún más a los inversores. Boeing reconocerá que el éxito en el sector militar es esencial para su recuperación, considerando la actual inestabilidad geopolítica en el mundo.
Las decisiones desafortunadas tomadas durante la pandemia, junto a problemas con la disponibilidad de materias primas y el transporte, siguen afectando a Boeing, aunque es un desafío que no solo enfrenta la compañía, sino también Airbus.
Finalmente, la presión de la FAA es innegable. Cualquier error en la calidad de los aviones que se están produciendo actualmente no solo perjudicaría a Boeing, sino también a los reguladores que supervisan estos estándares. Por tanto, recuperar la confianza será esencial para estabilizar su producción, mejorar sus finanzas y expandir su cartera de pedidos en el futuro.