El dueño de ‘Call of Duty’ regresa a beneficios en España en 2017 al son de un sector que crece al 17%
La compañía estadounidense dejó atrás las pérdidas de 1,01 millones de euros del ejercicio 2016 en España y ganó 364.938 euros en 2017. En paralelo, la empresa facturó 31,89 millones de euros, lo que representa un crecimiento interanual del 6%.
La industria española del videojuego está de dulce: alcanzó la cifra de 1.359 millones de euros en 2017 tras crecer casi un 17% respecto al año anterior, según datos de la Asociación Española de Videojuegos (Aevi). Al calor de una industria saludable y en constante evolución, Activision Blizzard, uno de los grandes players del sector con juegos como Call of Duty y Candy Crush, ha regresado a la senda de los beneficios en el país tras dos años en rojo.
Así, la filial española de la compañía dejó atrás las pérdidas de 1,01 millones de euros del ejercicio 2016 y ganó 364.938 euros en 2017, de acuerdo con las cuentas depositadas por la empresa en el Registro Mercantil a las que ha tenido acceso Kippel01. Ese mismo año, la sociedad Activision Blizzard Spain facturó 31,89 millones de euros, un 6% más que en el ejercicio precedente.
La subsidiaria se aproximó, por tanto, a los casi cincuenta millones de euros que ingresó en 2010, después de haber rebajado dicha cifra casi en un 40% desde entonces. En 2016, el negocio de la empresa decreció un 23% respecto a 2015, cuando su volumen de ventas alcanzó los 39,1 millones de euros en el mercado español.
Activision Blizzard destaca el crecimiento de los eSports y lanzamientos de la talla de ‘Call of Duty: WWII’ y ‘Destiny 2’
El grupo destaca en sus cuentas lanzamientos comerciales como Crash Bandicoot N. Sane Trilogy, Call of Duty: WWII y Destiny 2 como motores de sus ventas. Asimismo, la compañía también menciona el peso que ganan los deportes electrónicos en su negocio. “Si tuviéramos que destacar un área de especial crecimiento es el de los eSports”, señala. Para el estudio de desarrollo, se trata de un segmento asentado, cuyo éxito se ve confirmado por la involucración de las grandes telecos.
A 31 de diciembre de 2017, Activision Blizzard España contaba con unos fondos propios de 7,2 millones de euros, frente a los 6,7 millones de euros de un año antes. La filial, dirigida por el ex Nintendo Carlos Pombo, obtuvo un resultado de explotación de 825.150 euros en el ejercicio, un 6,6% más respecto a 2016.
Además, la empresa no tuvo que afrontar ninguna deuda en 2017. Un año antes, la compañía realizó el pago de 9,8 millones de euros en concepto de deudas con empresas del grupo y asociadas. El capital social estaba representado a cierre del ejercicio por 300 participaciones sociales de 60,10 euros de valor nominal cada una, totalmente suscritas y desembolsadas por el socio único Activision Blizzard International B.V., con sociedad de nacionalidad holandesa.
Para el ejercicio 2018, la sociedad espera continuar con la tendencia alcista en su volumen de ventas, centrando los lanzamientos en los títulos que aportan mayor rentabilidad, la jugabilidad online y el posicionamiento en los eSports. Activision Blizzard no prevé un crecimiento significativo de la cifra de negocio para entonces, ni tampoco variaciones significativas en la composición de la plantilla, que a cierre de 2017 se situaba en treinta empleados, igual que un año antes.
La recuperación de la subsidiaria española ha ido en dirección contraria a la evolución del resultado de su matriz. Activision Blizzard concluyó el año fiscal 2017 con unos ingresos de 7.017 millones de dólares (6.201 millones de euros), un 15,6% más en comparación con el ejercicio previo. No obstante, el grupo redujo sus ganancias de 966 millones de dólares (854 millones de euros) en 2016 a 273 millones de dólares (241 millones de euros) el año siguiente.
El sector del videojuego, en estado de gracia en España
Activision Blizzard destaca en sus cuentas la situación de bonanza de la industria de los videojuegos en el mercado español. El sector continúa consolidando su posición como uno de los primeros de ocio audiovisual e interactivo en el país, con casi dieciséis millones de jugadores españoles. A ello se suma un contexto de transformaciones continuas. Y es que “el lanzamiento de Xbox One X y Nintendo Switch muestra que el mercado de consolas no se cansa de innovar y mejorar”, según la compañía.
En el ejercicio 2017, el sector continuó con la senda de crecimiento iniciada en 2014, año en el que se puso fin a varios años consecutivos de descenso. Asimismo, 2017 reportó los mejores resultados desde 2009. Pese a que la venta online aumentó un 24,1%, la tienda física continuó siendo la primera opción para los consumidores españoles de videojuegos en 2017, con hasta 885 millones de euros.