El fútbol y los descuentos dañan a Vodafone: anota su mayor caída en ingresos por servicios desde 2015
La empresa británica registró unos ingresos por servicios de 1.091 millones de euros en el mercado español, un 7,7% menos en comparación con el mismo periodo del año anterior, debido a una intensa actividad comercial y a un escenario competitivo marcado por los derechos del fútbol.
La actividad comercial de Vodafone, en horas bajas en España. Tras unos meses de intensa actividad comercial marcados por los descuentos y las promociones, así como por la renuncia del grupo a la adquisición de los derechos del fútbol, la compañía de telecomunicaciones sufre el impacto de estos dos factores al anotar la cifra de ingresos por servicio más baja de los últimos tres años.
El grupo británico presentó ayer los resultados financieros correspondientes al periodo comprendido entre julio y septiembre de 2018 (que corresponde al segundo trimestre de su ejercicio fiscal). En estos, Vodafone confirmaba una caída del 7,2% en sus ingresos por servicios, es decir, aquellos que reflejan la actividad comercial de la empresa en el segmento residencial y el efecto del fútbol en los paquetes convergentes en España.
Estos se situaron en 1.091 millones de euros, la cifra trimestral más baja desde 2015. Este resultado, según la compañía, se vio influido por las “condiciones más ventajosas para los clientes”, así como por la “batalla promocional desatada en agosto tras la decisión de Vodafone de no adquirir todos los derechos de emisión del fútbol por su falta de rentabilidad”.
En el mismo periodo del año anterior, la empresa británica había obtenido unos ingresos trimestrales de 1.183 millones de euros, la más elevada en los últimos tres años. La guerra comercial también pasó factura a Telefónica, cuyo ingreso medio por usuario de Fusión creció sólo un 1,8%, la subida más baja de los últimos dos años; y a Orange, cuyos ingresos por servicio menguaron un 0,3%.
El impacto de la guerra comercial entre las empresas de telecomunicaciones y la renuncia del fútbol ya quedó reflejado en los resultados del primer trimestre, cuando los ingresos por servicios de Vodafone cayeron un 2,53%, según los datos facilitados por la operadora en su informe financiero. Ya en verano, Francisco Román, presidente de Vodafone y de la Fundación Vodafone España, advertía sobre cómo la “ferocidad comercial” podía terminar afectando negativamente a los resultados de las telecos.
El directivo, que el próximo 31 de diciembre abandonará el grupo, señalaba que esta situación era uno de los principales riesgos que afrontaba Vodafone en España, junto con los ciberataques y la seguridad de la información. Ahora, la compañía británica está segura que los beneficios de haber renunciado al fútbol se empezarán a ver reflejados en la temporada 2019, cuando dejen de emitir contenido relacionado con La Liga.
El grupo considera que la mayor fuga de usuarios a otras ‘telecos’ ya ha terminado
La futura estrategia de la teleco británica pasará ahora por apostar por contenido audiovisual. “En el futuro, a menos que los derechos del fútbol estén disponibles dentro de un marco de rentabilidad, intentaremos enfocar nuestra estrategia de contenido en películas y series de televisión premium”, explicó ayer Antonio Coimbra durante la presentación de los resultados financieros.
Vodafone está convencida de que el éxodo de clientes que estaban con la teleco por el fútbol ya ha pasado. Entre julio y septiembre, la empresa perdió 66.000 usuarios de televisión de pago (en el trimestre anterior ya había perdido a 32.000) y un total de 136.000 clientes de telefonía fija (que se suman a los 59.000 que perdió entre abril y junio).
“Nuestro rendimiento de adaptación frente a otros operadores se mantuvo resistente, y las promociones de verano terminaron a principios de octubre”, indicó el directivo. Vodafone España concluyó septiembre con 14,02 millones de clientes de telefonía móvil, 3,22 millones de clientes de banda ancha fija y 1,26 millones de clientes de televisión de pago.
El pasado noviembre, Vodafone lanzó una nueva propuesta comercial de bajo coste para intentar recuperar terreno en el mercado español a la que ha bautizado como Vodafone Bit. La compañía busca alcanzar a aquellos clientes que demandan una relación digital con su operador, grandes cantidades de datos y la propuesta “más sencilla posible desde el punto de vista conceptual”.