Hewlett Packard Enterprise multiplica por cinco sus ganancias en el primer trimestre de su ejercicio 2018
La compañía de servicios y software obtuvo un beneficio de 1.436 millones de dólares (1.166 millones de euros) entre noviembre y enero. En el mismo periodo, su facturación fue de 7.674 millones de dólares (6.233 millones de euros), un 11,2% más.
Hewlett Packard Enterprise (HPE) acrecenta su negocio. La compañía tecnológica obtuvo un beneficio de 1.436 millones de dólares (1.166 millones de euros) en el primer trimestre de su ejercicio 2018, por lo que quintuplicó las ganancias de 267 millones de dólares (217 millones de euros) que obtuvo en el mismo periodo del año anterior.
En cuanto a su cifra de negocio, la empresa facturó un 11,2% más entre noviembre y enero, hasta alcanzar un total de 7.674 millones de dólares (6.233 millones de euros). “La fortaleza de nuestros resultados del primer trimestre es la prueba de que contamos con la estrategia correcta”, señaló Antonio Neri, presidente y consejero delegado de HPE desde el pasado 1 de febrero, cuando sustituyó en el cargo a Meg Whitman.
El directivo se comprometió a elevar la rentabilidad para los accionistas y la inversión en la plantilla. “Tenemos el plan de devolver 7.000 millones de dólares (5.690 millones de euros) a los accionistas en forma de recompra de acciones y dividendos a finales del ejercicio 2019, incluyendo un incremento del 50% de nuestro dividendo”, indicó Neri.
Hewlett Packard Enterprise aumentó un 11,2% su cifra de negocio entre noviembre y enero
HPE concluyó el año fiscal 2017 a finales del pasado octubre con un beneficio de 344 millones de dólares (293 millones de euros), un 89% menos en comparación con las ganancias obtenidas en el ejercicio precedente. La empresa atribuyó el retroceso de su resultado a la reestructuración que estuvo llevando a cabo para redireccionar su negocio. La compañía registró una cifra de negocio de 28.871 millones de dólares (24.598,3 millones de euros), un 4,65% menos respecto al año fiscal 2016.
El año pasado, el grupo estadounidense anunció que preparaba hasta 5.000 despidos antes de que finalizase 2017. Se trató de un recorte del 10% de la plantilla y afectó tanto a los empleados de Estados Unidos como a los del resto de oficinas.