Sentencia del TJUE: Uber es una empresa de transporte
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha decidido que la actividad de Uber se enmarca en los servicios de una compañía de transporte. De esta forma, la compañía deberá acatar las mismas licencias y autorizaciones que los taxistas.
Uber es una compañía de transporte. Así lo ha dictaminado el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que lleva meses valorando si la actividad del grupo estadounidense se enmarcaba en el sector del transporte o si podía calificarse como servicio de la sociedad de la información.
La Justicia Europea, finalmente, ha decidido que la actividad de Uber es similar a la de cualquier taxi que circule por las calles y que, por tanto, la empresa deberá asumir las mismas licencias y autorizaciones que estos. La sentencia pone fin al servicio de UberPop, que permite a cualquier usuario con un carnet de conducir ofrecer sus servicios como conductor por horas, y que en España y Francia ya había sido prohibido.
El fallo del TJUE también pone en jaque el grado de responsabilidad de Uber ante los servicios que brinda. Desde su condición de servicio de la sociedad de la información, la compañía esgrimía que actuaba como intermediario entre los profesionales y los clientes. Al ser considerada una empresa de transporte, las obligaciones de pagar impuestos u otros pasarán del conductor a la compañía.
“Uber crea una oferta de servicios de transporte urbano”, expone el TJUE
Según recoge la sentencia del TJUE, Uber no sólo pone en contacto a profesionales con usuarios, sino que “crea al mismo tiempo una oferta de servicios de transporte urbano que hace accesible concretamente mediante herramientas informáticas y cuyo funcionamiento general organiza”.
Ante ello, desde Uber aseguran que "esta decisión no cambia nada en la operativa de Uber en la mayoría de los países de la Unión Europea. Sin embargo, todavía hay millones de europeos que no pueden usar apps como la nuestra”. La empresa ha incidido en que conviene regular servicios como Uber y que por ello “continuarán dialogando con países y ciudades en toda Europa".
El documento de las autoridades europeas también recoge que cada Estado miembro deberá regular las condiciones de prestación de estos servicios, “siempre que se respeten las normas generales del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea”.
El pasado mayo, un abogado del Tribunal de Justicia de la Unión Europea ya dictaminó que la compañía estadounidense era un servicio de transporte, dado que “la prestación de transporte constituye el elemento principal desde un punto de vista económico”.