Uber acepta la entrada de SoftBank en su capital
El grupo nipón invertirá alrededor de 9.000 millones de dólares en acciones de la compañía dentro de un mes, que se sumarán a los mil millones de dólares inyectados en el capital de Uber tras la firma del acuerdo.
Uber da entrada a SoftBank en su capital. La compañía estadounidense ha aceptado el acuerdo con SoftBank, que invertirá un total de 10.000 millones de dólares (8.588 millones de euros) en el grupo que lidera Dara Khosrowshahi, haciéndose con el 14% del capital.
El pacto incluye una inversión inicial de mil millones de dólares (858.784 millones de euros) en la empresa de alquiler de vehículos con conductor, a la que se sumarán otros 9.000 millones de dólares (7.729 millones de euros) en acciones de la compañía dentro de un mes.
La venta de esta participación podría impulsar a Uber en el camino para realizar cambios en su gobierno corporativo y para preparar su salida a bolsa en 2019. “Creemos que este acuerdo es un fuerte voto de confianza en el potencial de Uber a largo plazo”, comunicó la empresa estadounidense a TechCrunch.
Uber tiene previsto salir a bolsa en 2019 gracias al trato cerrado con SoftBank
Por su parte, SoftBank podría obtener dos asientos en la junta directa como resultado de esta inversión. El pasado octubre, el consejo de Uber votó de forma unánime la aprobación de la propuesta de inyección financiera tanto de SoftBank como de Dragoneer Investment Group.
Inversores como TPG, Tiger Global, DST Global y el gigante chino Tencent también podrían comprar acciones de Uber como parte del acuerdo. El valor actual de la empresa estadounidense es de casi 70.000 millones de dólares (60.115 millones de euros).
Además, la figura de Travis Kalanick, ex consejero delegado de Uber que dimitió el pasado junio, se ve empequeñecida ante el trato con SoftBank. El marco de este acuerdo contempla una mayor igualdad entre todos los accionistas, de forma que se eliminan ventajas ejecutivas como el super voto de algunos directivos del consejo.
La eliminación de las acciones preferentes, la necesidad de pactar los planes estratégicos en el consejo y el nombramiento de nuevos consejeros independientes debilitan la posición de Kalanick, quien conserva un puesto en el consejo.