Uber Eats pone en jaque a Deliveroo y Just Eat con su regreso a Barcelona

Uber Eats volverá a circular por las calles de Barcelona. Casi tres años después de que la plataforma de comida a domicilio de Uber se viera obligada a dar marcha atrás en la capital catalana, la tecnológica se apresura a cerrar los últimos flecos de su regreso a la capital catalana, que podría hacerse efectivo en las próximas semanas, según explican fuentes de la propia empresa a Kippel01.

El próximo desembarco de Uber Eats en Barcelona pondrá en jaque a compañías como Deliveroo, Glovo o Just Eat, que tendrán que enfrentarse a la llegada de un nuevo competidor en el negocio del reparto de comida a domicilio. El retorno del grupo a la capital catalana coincide, además, con el primer aniversario de la plataforma en Madrid.

Uber Eats suspendió su servicio en Barcelona a finales de 2015. Según explicó la empresa en su cuenta de Medium, “España es uno de los pocos países europeos en los que Uber no opera ningún servicio de ridesharing y es por ello que hemos decidido centrar todos nuestros esfuerzos en colaborar con las administraciones para el desarrollo de una regulación justa”. Unos meses antes, el Juzgado de lo Mercantil número de 2 Madrid había ordenado de forma cautelar el cese y la prohibición de Uber en todo el país.

Uber Eats volverá a estar operativo en Barcelona en las próximas semanas

De momento, la compañía estadounidense ha abierto un proceso de selección en el que busca a un responsable que lidere el desarrollo de Uber Eats en el nordeste de España. El grupo también ha sellado otras cuatro ciudades clave para expandir su negocio en el país: Málaga, Sevilla, Valencia y Zaragoza durante 2018.

Desde el año pasado, Uber Eats está disponible en Madrid, donde durante la segunda mitad del año triplicó su volumen de negocio y elevó en un 44% el número de repartos por hora, según afirma la empresa. Toussaint Wattinne, responsable de Uber Eats en Londres, aseguró en una entrevista a Business Insider que el negocio de la comida a domicilio en la capital española crece más que el servicio de transporte.

En Madrid, la empresa está capitaneada por Manel Pujols, quien aseguró en septiembre que Uber Eats empezaría “su plan de expansión en España para que cada vez más ciudadanos puedan disfrutar de sus restaurantes favoritos a la velocidad de Uber”. El directivo, que ascendió al cargo en marzo de 2017, es el fundador de Travelcoin.

La compañía también prepara su aterrizaje en Sevilla, Málaga, Valencia y Zaragoza

“Seremos la compañía de entrega de alimentos más grande del mundo este año”, aseguraba Dara Khosrowshahi en el marco del DLD en Múnich. La declaración de intenciones del nuevo consejero delegado de Uber se ha hecho efectiva con la adquisición de Ando, una empresa fundada por el chef David Chang y que funciona como un restaurante online: el cliente puede pedir la comida online del restaurante, pero este no cuenta con ningún establecimiento físico.

Se desconoce el importe de la operación, aunque previsiblemente le dará a Uber una mayor ventaja competitiva en el ámbito tecnológico. Según ha explicado la empresa a Techcrunch, “las ideas de Ando ayudarán a nuestro equipo de tecnología mientras trabajamos con nuestros socios (los restaurantes) para hacer crecer su negocio”.

A finales de 2017, la plataforma de Uber selló un acuerdo con Axa Corporate Solutions para dar cobertura gratuita a los repartidores que operan a través de esta en nueve países de la Unión Europea, que incluyen España, Austria, Bélgica, Italia, Holanda, Polonia, Portugal, Suiza y Reino Unido. El seguro cubre accidentes personales, daños personales o materiales, así como prestación en efectivo en caso de hospitalización. En caso de accidente, el repartidor tendrá que rellenar un formulario online disponible a través de la aplicación.

En la actualidad, Uber Eats está disponible en más de 200 ciudades repartidas en treinta países. La presencia del grupo es especialmente relevante en su mercado local, Estados Unidos, y en Europa. La compañía también opera en las principales capitales de Asia y Latinoamérica.

La guerra por el ‘food delivery’

El regreso de Uber Eats a Barcelona incrementará la presión en una ciudad en la que Glovo, Deliveroo y Just Eat luchan por conseguir la mayor cuota de mercado. Si bien para Glovo es una parte más de su negocio (consistente en llevar al usuario cualquier cosa que necesite), la empresa se ha apresurado a avanzar en el negocio de la alimentación con el lanzamiento de SuperGlovo.

El nuevo servicio de la start up permite a sus usuarios realizar la compra del supermercado desde la propia app y recibirla en casa en menos de una hora. De momento, el nuevo servicio sólo está operativo en Barcelona, donde se han habilitado siete puntos de recogida.

Deliveroo, por su parte, anunció en septiembre su desembarco en Málaga y Sevilla, dos de las próximas ciudades en las que prevé entrar Uber Eats próximamente. El grupo británico concluyó 2017 con un total de 480 millones de dólares de financiación (392 millones de euros) destinados a su expansión internacional, la creación de sus propias cocinas y la captación de talento.

A finales de año, la Unión General de Trabajadores ponía el foco sobre estas empresas al considerar que existe una “relación fraudulenta de falsos autónomos con los riders y demás mensajeros que distribuyen comidas y paquetes en las principales ciudades de España”. La demanda de UGT llegaba poco después de que Trabajo rechazara el modelo laboral de Deliveroo y reconociera de forma indirecta que sus repartidores son falsos autónomos.