Uber traslada su sede a Madrid en plena guerra del taxi

Uber hace las maletas en Barcelona y traslada su sede oficial a Madrid. La compañía estadounidense, que concentra la mayor parte de su actividad en la capital española, ha decidido cerrar la persiana de su oficina en Barcelona e instalarse en la calle Capitán Haya, en el edificio Eurocentro, según Abc. 

Hasta la fecha, el domicilio social de Uber Systems Spain, filial española del grupo, se encontraba en Avenida Diagonal, tal y como consta en el Registro Mercantil. Pese a ello, la empresa llevaba varios años concentrando su actividad en Madrid tras la suspensión de su servicio UberPop en esta ciudad y en Barcelona en 2014. Meses después, la empresa reotomó su actividad, pero solo en la capital.

«Se trata de un proceso administrativo; en realidad hace ya más de un año que nos mudamos a Madrid, ciudad en la que ya hay disponibles tres servicios de Uber y donde seguimos creciendo incluso por encima de nuestras expectativas», explica un portavoz de la compañía. Uber ha negado que el traslado de su sede respondiera a una estrategia para conseguir mejores condiciones fiscales.

En los últimos meses, la compañía ya dio sus primeros pasos en Madrid en materia de oficinas al instalar su primer Greenlight Hub en la capital, tal y como avanzó Kippel01. Este centro sirve de apoyo para los trabajadores de Uber y se instala en aquellos mercados con más potencial, según explicaron fuentes de la empresa.

Uber ha negado que el traslado de su sede respondiera a una estrategia para conseguir mejores condiciones fiscales

Uber, que acaba de presentar los resultados financieros de su primer trimestre, concluyó los tres primeros meses del año con unas ventas de 3.400 millones de dólares (3.027 millones de euros), frente a los 908 millones de dólares que ingresó en el mismo periodo del año anterior.

Por el contrario, Uber también ha disparado sus pérdidas hasta 708 millones de dólares (632 millones de euros), un tercio más en comparación con el mismo periodo del año anterior. En relación con último trimestre, no obstante, el grupo ha conseguido reducir sus números rojos de 991 millones de dólares (882,4 millones de euros) a 708 millones de dólares.