Adigital constata que España está aún lejos de los líderes digitales

España no ocupa ningún lugar relevante en los países más avanzados en términos de digitalización. Así lo constata el último informe de la Asociación Española de la Economía Digital (Adigital), España Nación Digital, que recoge distintos indicadores que miden el avance digital y tecnológico del país.

Según este, el mercado español pertenece al grupo de economías “de segundo nivel” y no está siendo capaz de capturar el valor asociado al liderazgo digital. Ello se traduce en un impacto directo en la economía. Desde Adigital aseguran que “la apuesta por la digitalización se concretaría en un impacto de entre uno y dos puntos anuales en el Producto Interior Bruto (PIB)”.    

“En Adigital tenemos el convencimiento firme de que la digitalización es la gran oportunidad para la economía española”, ha asegurado Carina Szpilka, presidenta de la asociación y cofundadora de la firma de capital riesgo K Fund.

“La digitalización es la gran oportunidad para la economía española”, señala Carina Szpilka, presidenta de Adigital

Algunos de los datos analizados por Adigital resaltan que sólo el 1% de especialistas en TIC son mujeres, o que España ocupa el puesto 24 de 39 en el Índice Global de Innovación de Insead, y el 19 de 39 en cuanto a la capacidad de las instituciones públicas para crear un entorno regulatorio propicio para el desarrollo de la actividad empresarial.  

La directiva ha insistido en que cualquier avance en este campo “sólo podrá tener éxito con la participación de todos los agentes del ecosistema”, mientras que Francisco Polo, secretario de Estado para el Avance Digital, ha indicado que “el Gobierno es sólo una pieza más del ecosistema” que no puede recorrer el camino “sin todos los demás”.

En la pasada edición del South Summit, Pedro Sánchez, presidente del Gobierno español, anunció algunas de las propuestas que están bajo el paraguas de la Estrategia de Nación Emprendedora. Entre ellas destacan las mejoras fiscales a aquellas empresas que financien la actividad de start ups, o la transferencia de los créditos fiscales generados en el Impuesto de Sociedades por actividades de I+D+i a estas mismas compañías.