El Canal de Panamá: una historia de control y tensiones entre EE.UU. y Panamá
Donald Trump sugiere que EE.UU. podría recuperar el control del Canal de Panamá, generando tensiones con el gobierno panameño y reacciones internacionales.
Donald Trump, en una reciente conferencia de prensa, sugirió la posibilidad de que Estados Unidos pudiera recuperar el control del Canal de Panamá, actualmente administrado por Panamá. Durante su intervención, el presidente electo destacó que esta medida estaría relacionada con la seguridad económica de EE.UU., generando una ola de reacciones a nivel internacional.
Javier Martinez-Acha, jefe del Ministerio de Relaciones Exteriores de Panamá, respondió a estas declaraciones afirmando que el canal siempre será controlado por panameños, rechazando cualquier idea que sugiriera el uso de la fuerza por parte de Estados Unidos. Este intercambio de declaraciones pone de relieve la histórica tensión entre ambos países en torno al canal, especialmente tras el tratado de 1977 que estipuló la transferencia de derechos a Panamá y que culminó con el traspaso total de la administración del canal en 1999.
El Canal de Panamá, que conecta los océanos Atlántico y Pacífico, fue inaugurado en 1920 después de una larga y problemática construcción. Originalmente, su construcción se inició bajo la dirección del ingeniero francés Ferdinand Marie de Lesseps en 1881, pero los trabajos se detuvieron debido a altos costos y enfermedades entre los trabajadores. Fue solo en 1904 que Estados Unidos tomó el control de la construcción tras la separación de Panamá de Colombia, lo que resultó en la firma del Tratado Hay-Bunau-Varilla, que otorgó a EE.UU. el control del área del canal.
Las relaciones entre EE.UU. y Panamá respecto al canal se deterioraron con el tiempo, alcanzando su punto más bajo en la década de 1960. Sin embargo, tras el tratado firmado por el presidente Jimmy Carter y el general panameño Omar Torrijos en 1977, se estableció un camino hacia el traspaso total de la administración del canal, que finalmente se completó en 1999. A pesar de esto, el tratado permitió a EE.UU. intervenir militarmente si consideraba que la neutralidad del canal estaba amenazada.
Recientemente, en la misma conferencia, Trump también abordó la idea de "comprar" Groenlandia, lo que ha provocado reacciones de varios países, incluida Dinamarca, poniendo de manifiesto la naturaleza provocadora de sus comentarios en la arena internacional.