Cántabros y asturianos, los únicos españoles que ganan poder adquisitivo en 2017

Cantabria y Asturias, el oasis del poder adquisitivo de España. Los habitantes de estas dos regiones del país fueron los únicos que han ganado poder de compra en los últimos dos años. En cambio, en el resto de comunidades autónomas, los asalariados perdieron entre 18 euros y 655 euros anuales descontando la inflación de la evolución de los sueldos. En el conjunto del país, los ciudadanos españoles perdieron 347 euros de poder adquisitivo.

El poder de compra de la retribución media de los españoles se ha visto reducida un 1,7% en los últimos dos años, descontando la inflación de la evolución de los sueldos, según el Monitor de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo, elaborado por Adecco junto con Barceló y Asociados. El retroceso equivale a señalar que el asalariado medio tiene, al cabo de un año, 347 euros menos en su cuenta corriente de los que tenía hace dos años.

Cantabria encabezó la subida del poder adquisitivo en el país, con 543 euros adicionales por habitante al año desde 2015, un 2,9% más. En segundo y último lugar del espectro de subidas se situó Asturias, con 490 euros de poder adquisitivo adicional, un alza del 2,9%.

Entre las comunidades autónomas cuyos habitantes perdieron poder de compra, los descensos más leves se registraron en Castilla-La Mancha, Comunidad Valencia, Canarias y Galicia. En estas regiones, los retrocesos oscilaron entre los dieciocho y los 45 euros.  

Con pérdidas de poder adquisitivo entre los 100 euros y los 400 euros se situaron Navarra, Baleares, con 124 euros y 172 euros, respectivamente, así como Murcia y Extremadura, con caídas de 285 euros y 401 euros en cada caso.

Las comunidades autónomas más castigadas por la pérdida de poder de compra de sus salarios en España fueron La Rioja, País Vasco y Aragón. En la primera región, sus habitantes acumulan un retroceso de 655 euros, mientras que los vascos y aragoneses registraron pérdidas de 642 euros y 559 euros en su poder adquisitivo.

Los asalariados de La Rioja, País Vasco y Aragón son los que han perdido un mayor poder adquisitivo desde 2015

Madrid, oro de los salarios en España

Con 1.936 euros brutos al mes por trabajador, la Comunidad de Madrid presenta el mayor salario medio de toda España. La cifra supone un alza del 0,2% respecto al año anterior. En País Vasco, por su parte, la retribución de los asalariados se situó en 1.934 euros a cierre de 2017, un 0,4% inferior, mientras que el sueldo medio en Navarra fue 161 euros inferior al que percibe un vasco.

Navarra y Cataluña mantienen el tercer y cuarto puesto en el ránking de los mayores salarios de España. No obstante, mientras que la retribución media de los navarros se elevó un 2,2% el año pasado, hasta 1.773 euros, los sueldos mensuales de los catalanes cayeron un 0,1%, hasta 1.721 euros.

El año pasado entró una quinta comunidad autónoma entre las que cuentan con un salario medio superior a la media nacional, de 1.639 euros, algo que no sucedía desde el 2000. Se trata de Asturias, donde la retribución mensual bruta de sus habitantes ascendió a 1.664 euros en 2017, un 2,6% más.

El resto de regiones españolas registraron salarios medios inferiores a la media nacional. Encabezando la parte baja de la tabla están Extremadura, con 1.330 euros; Canarias, con 1.422 euros; y Murcia, con una retribución bruta mensual de 1.434 euros.  

Canarias, Galicia y Murcia, las peores regiones para trabajar

El estudio de la consultora de recursos humanos también analiza el grado de satisfacción de los asalariados con sus puestos de trabajo. Cantabria, Navarra e Islas Baleares, que le ha arrebatado el tercer puesto a la Comunidad Valenciana, figuran como las mejores autonomías para trabajar de toda España.

En el lado opuesto de la balanza se encuentran, por este orden, Canarias, Galicia y Murcia. Estas tres comunidades son las que presentan un menor grado de satisfacción laboral. Para la realización del informe, Adecco analiza cinco variables vinculadas al entorno laboral de las personas: la remuneración, la seguridad laboral, las oportunidades de empleo y desarrollo profesional, la conciliación entre la vida personal y profesional y la conflictividad laboral.