¿Cómo se consume la TV en España? Multicanal, compartida y más OTT
El 45% de los internautas españoles usan plataformas over the top. Cada vez hay una diferenciación más clara sobre qué dispositivos se utilizan en función del contenido.
El consumo audiovisual cada vez está más fragmentado, pero ya no sólo entre plataformas, sino que también en cuanto a dispositivos. El principal detonante del cambio ha sido la posibilidad de visualizar contenidos online, que ha hecho que el televisor tradicional sea un soporte que cada vez compite más con el smartphone. El 82% de los internautas ya consume vídeo a través de su móvil, un salto que también ha afectado a la duración de las obras: el 49% es usuario habitual de piezas que duran menos de diez minutos, por el 16% que aguantan más de este tiempo.
Esta circunstancia se debe también al fraccionamiento del tiempo de visionado, pues un 51% consume vídeos fuera del hogar mientras va en transporte público o come. Eso sí, cada vez se pasan más horas ante una pantalla mobile, con una media semanal de cuatro horas y seis minutos. Y más que lo harían si tuvieran una tarifa ilimitada de datos, como afirman un 37% de los encuestados en el estudio de The Cocktail Analysis. Aun así, está por debajo de las once horas semanales dedicadas a la televisión IP, dominante en un mercado donde la oferta de pago la dominan los grupos de telecomunicaciones.
Este avance se debe a la renovación del parque de televisores en España, pues por primera vez el número de internautas con smart TV es superior a lo que no, con un 57% del total, ocho puntos más que hace un año. Además, y a diferencia de lo que podía suceder antes, un 85% de sus propietarios ya la conectan a Internet para utilizar aplicaciones y plataformas OTT, en lugar de restringirse a la oferta de la TDT.
El 62% de los internautas asegura poseer algún tipo de suscripción de pago, ya sea un servicio de ‘streaming ’ o la televisión
“El consumo online de contenidos audiovisuales se refuerza en 2018 como opción principal del espectador internauta”, constata la firma, que cuenta con el apoyo de Telefónica en la elaboración de este estudio. Una afirmación que ayuda a entender el porqué del éxito de compañías como Netflix o HBO, que nacieron en entornos digitales y hoy cada vez son más utilizadas en televisores.
El 62% de los internautas asegura poseer algún tipo de suscripción de pago, ya sea un servicio de streaming o la televisión de grupos como Telefónica o Vodafone, lo que representa once puntos más que hace un año. Un avance que explica que sea este el momento elegido por la británica Dazn para desembarcar en España adquiriendo la exclusiva de MotoGP, Premier League y Euroliga, entre otros.
El informe revela que el momento de desconocimiento inicial ha pasado, pues el 90% de los internautas ya sabe de la existencia de este tipo de propuestas audiovisuales. Ahora bien, este porcentaje cae al 45% cuando se pregunta si son usuarios de las mismas y baja al 36% a la pregunta de si paga por ello. ¿La razón? Hay un 17% que admite que comparte cuenta con amigos o familiares, porcentaje que se dispara al 41% en el caso de Netflix y baja al 11% en televisión IP.
Otra de las conclusiones relevantes del informe es que la irrupción de las OTT no está dañando al negocio de las telecos. “La aparición de la OTT no desplaza la suscripción a IPTV y prácticamente la mitad de sus clientes pagan por ambos servicios”, señala el informe. En concreto, un 17% admite que, por ejemplo, es a su vez usuario de Movistar+ y HBO, por un 19% que sólo paga por servicios de suscripción online ajenos a paquetes que incluyen ADSL, telefonía móvil o fija.
Hay un 17% que admite que comparte cuenta con amigos o familiares, porcentaje que se dispara al 41% en el caso de Netflix
Esta complementariedad es la que ha llevado a Telefónica a firmar un histórico acuerdo con Netflix, por el que toda su oferta de entretenimiento se integrará en la de la telecos a partir del año que viene. La compañía española aspira a reforzar aún su posición de liderazgo en este mercado, donde tenía 3,93 millones de clientes a cierre del primer trimestre de 2018. Su perseguidor más inmediato era Vodafone, con 1,39 millones de usuarios, por los 619.250 de Orange.
Una de las ventajas de la fragmentación del consumo es que ha dado alas a distintos tipos de contenidos. El estudio refleja que este se especializa por dispositivo y se centraliza en dos ejes: las ficciones, por un lado, y lo cotidiano y actual, por el otro. La smart TV es la preferida para películas, con un 54% de los usuarios, y las series, con porcentajes que oscilan entre el 35% y el 39% en función de si son españolas o extranjeras. El smartphone, por su parte, centraliza tutoriales y noticias, mientras que la música ha logrado abrirse paso en ambos canales.
El informe no hace grandes referencias a cómo es el consumo deportivo, más allá de que un 56% valora de forma muy buena que Movistar+ incluya el fútbol en su oferta y que un 49% valore de igual forma la presencia de otros deportes. Ahora bien, The Cocktail Analysis revela que entre los clientes del grupo español se priorizan otros contenidos como series, películas y documentales, que después a la hora de la verdad no pesan tanto como el balompié en la guerra por la captación de clientes.
El informe de la consultora también señala que, tras caídas en años anteriores, el consumo de YouTube y las descargas ilegales se mantienen con índices del 85% y el 67%, respectivamente, aunque con ligeros cambios en los dispositivos de visionado. Teniendo en cuenta datos del informe sobre uso agregado de contenidos mediante estos sistemas, el contenido más consumido son las películas (91%), seguido por las series extranjeras (81%) y las series españolas (60%).