El euro se acerca a la paridad con el dólar tras tocar mínimos de dos años

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El euro se acerca a la paridad con el dólar tras tocar mínimos de dos años

El dólar estadounidense alcanza su nivel más alto en más de un año, mientras el euro se acerca a la paridad, generando apuestas en el mercado.

Descripción

El inicio del año trae consigo un panorama favorable para el dólar estadounidense, que ha visto al Dollar Index alcanzar los 109,4, su nivel más alto desde octubre de 2022. Esta fuerte apreciación del dólar ha impactado de manera negativa al euro, que recientemente tocó mínimos de más de dos años contra su contraparte estadounidense. La moneda única europea se encuentra cada vez más cerca de la paridad con el dólar, lo que ha llevado a los inversores a apostar fuertemente en este movimiento: se estima que alrededor de 2,5 mil millones de euros han sido invertidos en opciones sobre la paridad o en niveles inferiores, cuadruplicando la media diaria del mes anterior.

Desde finales de septiembre, los fondos especulativos han adoptado posiciones bajistas sobre el euro, anticipando que la economía de Estados Unidos crecerá más que otras economías. En este contexto, se espera que la Reserva Federal mantenga tasas de interés más altas en comparación con Europa, lo que contribuye a la fortaleza del dólar. Además, proyecciones sugieren que las políticas del próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, también serian un impulso para el crecimiento y la inflación.

Según analistas de ActivTrades, la paridad con el dólar se ha convertido en un objetivo contundente para el euro, especialmente después de haber descendido a niveles de 1,0225. La fuerza del dólar ha venido acompañada de sólidos flujos de capital, impulsados por un rendimiento superior de los mercados bursátiles estadounidenses en relación con los globales. Coinciden en este análisis otras instituciones financieras reconocidas, como Rabobank, Wells Fargo e Investec, que prevén que el euro podría probar la paridad con el dólar en el segundo trimestre del año.

Ante este panorama, cualquier modificación en la tendencia actual requeriría una disrupción significativa en las políticas monetarias estadounidenses o un cambio en la postura del próximo presidente. Por el momento, la fortaleza del dólar y las expectativas sobre el euro marcan la pauta en el mercado cambiario.