Los futuros del S&P500 anticipan compras tras resultados de Nvidia
Wall Street anticipa ganancias impulsadas por resultados de Nvidia, mientras los inversores esperan datos macroeconómicos clave que podrían influir en la Reserva Federal.
Wall Street anticipa un día de ganancias este jueves, luego del signo mixto observado el miércoles, mientras los inversores asimilan los resultados de Nvidia y esperan la publicación de datos macroeconómicos relevantes. El fabricante de chips se enfrenta a una volatilidad en su cotización, pero, tras anunciar un beneficio neto de 22.091 millones de dólares en el cuarto trimestre, que representa un aumento del 80%, también reportó un incremento del 78% en sus ingresos, alcanzando los 39.331 millones de dólares.
Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank, comenta que "Nvidia sigue haciendo un trabajo increíble", aunque advierte sobre las dificultades en la fabricación de chips Blackwell, que han resultado ser complejas y costosas, lo que podría reducir los márgenes de beneficio más de lo previsto. A pesar de los sólidos resultados, la reacción del mercado sugiere que impresionar a los inversores se ha vuelto complicado. La actual valoración de la compañía es bastante alta y la creciente competencia, además del riesgo de que sus clientes desarrollen sus propios chips, complican aún más la situación.
Dan Coatsworth, analista de inversiones de AJ Bell, señala que "estamos en un punto de inflexión importante en la historia de Nvidia", destacando que el interés creciente de otras empresas por adentrarse en el mercado de inteligencia artificial podría perjudicar el crecimiento de Nvidia y afectar negativamente el precio de sus acciones.
El enfoque del mercado también está puesto en los datos macroeconómicos que se publicarán este jueves. Se espera que el PIB del cuarto trimestre muestra una desaceleración del crecimiento en Estados Unidos, pasando del 3,1% al 2,3%. Si estos pronósticos se cumplen, esto podría dar un impulso a las expectativas moderadas de la Reserva Federal (Fed).
Sin embargo, la situación se complica por los aranceles, que incrementan las expectativas inflacionarias en un momento en que la inflación ya muestra señales de calentamiento, limitando así la capacidad del banco central para intervenir. Este viernes se publicará el deflactor de consumo PCE de enero, un indicador preferido por la Fed, donde se anticipa una ligera disminución en la tasa general hasta el 2,5% desde el 2,6%, y una relajación de la variable subyacente hasta el 2,6%.
En otros mercados, el petróleo West Texas ha subido un 0,96%, alcanzando los $69,28, mientras que el Brent avanza un 1,02% a $73,27. El euro se deprecia un 0,05% y se sitúa en $1,0477, y el precio de la onza de oro cae un 0,86%, situándose en $2.905. Además, la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años se revaloriza al 4,312% y el bitcoin ha perdido un 2%, cotizando a $86.759.