¿Va a llegar realmente la paz a nivel mundial con Donald Trump?

EntornoDonald Trump

¿Va a llegar realmente la paz a nivel mundial con Donald Trump?

El 2025 se perfila como un año crucial en la geopolítica global, con líderes como Trump y Von der Leyen enfrentando retos interconectados.

Descripción

El año 2025 se presenta como un periodo decisivo para la geopolítica mundial, donde los principales actores tendrán que demostrar avances concretos ante una serie de desafíos interconectados. Donald Trump, junto a Elon Musk, estará bajo un intenso escrutinio para cumplir sus promesas electorales, que incluyen la detención de conflictos y la gestión de relaciones comerciales tensas, en particular con China. La posibilidad de aumentar los aranceles y las preocupaciones por la inmigración podrían desencadenar respuestas significativas en el ámbito internacional, afectando las proyecciones económicas a nivel global.

Por su parte, Ursula von der Leyen, reconfirmada con un fuerte mandato, enfrenta la compleja tarea de abordar los altos costos energéticos en Europa, que son notablemente superiores a los de Estados Unidos, y un sector industrial en declive. La implementación de tres planes estratégicos requerirá un presupuesto anual de 800 mil millones de euros, en un contexto de deuda pública apenas manejable y crecimiento estancado. La transición económica en Alemania y Francia es incierta, especialmente con las elecciones a la vista en Berlín y la amenaza de inestabilidad en la zona euro.

En Asia, China, liderada por Xi Jinping, tiene la ambición de convertirse en una nación “plenamente desarrollada” para 2049, pero se enfrenta a un crecimiento económico ralentizado y un preocupante nivel de deuda que alcanza el 290% del PIB. Las medidas de estímulo económico ya no son viables, lo que obliga al liderazgo chino a equilibrar sus prioridades internas con el apoyo geopolítico a Rusia, en un entorno de creciente competencia con Estados Unidos.

Mientras tanto, la situación en Ucrania comienza a mostrar signos de un posible diálogo negociado, especialmente tras la declaración de Zelensky sobre la falta de fuerza para recuperar todos los territorios ocupados por Rusia. Las condiciones de este diálogo y la disposición de Moscú para hacer concesiones son aún inciertas. En el Medio Oriente, Israel busca estabilizar las fronteras con Gaza, Líbano y Siria, pero la paz duradera sigue lejos, especialmente en ausencia de un camino claro hacia un estado palestino.

El cambio climático y el desarrollo sostenible abren otra dimensión crítica, ya que la COP28 plantea metas ambiciosas para las energías renovables. El compromiso de triplicar la capacidad renovable para 2030 parece estar en riesgo. La pregunta es si el Occidente podrá alinear la transición energética con sus propios intereses, mientras que India enfrenta el desafío de no depender exclusivamente del carbón y los combustibles fósiles para su crecimiento.

Con estos antecedentes, el 2025 promete ser un año de grandes incertidumbres, en el que las acciones de Trump y su administración definirán el rumbo de muchos de estos conflictos y desafíos globales. La comunidad internacional observa con expectativa los próximos pasos de los líderes, sabiendo que el futuro estará moldeado por decisiones que se tomen en los meses venideros.