Mercados Derivados
Los mercados derivados son espacios donde se comercian contratos financieros que dependen del rendimiento de otros activos, facilitando tanto la especulación como la gestión de riesgos.
Los mercados derivados son plataformas financieras donde se negocian instrumentos cuyo valor se basa en el rendimiento de otros activos, conocidos como activos subyacentes. Estos contratos permiten a los inversores especular sobre el futuro de estos activos, lo que puede incluir acciones, bonos, divisas o materias primas. La posibilidad de utilizar apalancamiento en estas transacciones ofrece tanto oportunidades como riesgos significativos, lo que las hace atractivas para los inversores con un alto nivel de conocimiento y tolerancia al riesgo.
Los mercados derivados también juegan un papel crucial en la gestión de riesgos, permitiendo a las empresas y a los inversores protegerse contra la volatilidad y las fluctuaciones inesperadas en el mercado. Sin embargo, es fundamental entender que, aunque ofrecen estrategias de cobertura eficaces, también conllevan complejidades que requieren una adecuada comprensión y análisis.