Las grandes tecnológicas invierten en Aragón: un reto energético para 2030
España atrae a gigantes tecnológicos para centros de datos, especialmente en Aragón, pero el aumento del consumo eléctrico plantea importantes retos energéticos para 2030.
En los últimos años, España ha atraído la atención de importantes empresas tecnológicas que buscan establecer sus centros de datos en el país. Entre las comunidades más atractivas se encuentra Aragón, donde gigantes como Meta, Microsoft, Amazon y Google han planeado importantes inversiones. Sin embargo, se estima que para 2030, estos centros consumirán la mitad de la electricidad disponible en la región, lo que plantea un desafío energético significativo.
Recientemente, el Gobierno de Aragón presentó el 'Plan Energético de Aragón 2024-2030', que analiza el estado actual y los objetivos futuros del sector energético en la comunidad. De acuerdo con este plan, desde 2020 hasta finales de 2023, la región ha incrementado de manera notable su capacidad de energía eólica y solar, con un aumento del 18% en la energía eólica y del 56% en la energía solar. Esta tendencia está alineada con un excedente de energía proveniente de fuentes renovables en España.
La consultora Aurora Energy Research destacó en un informe que España es una ubicación privilegiada para los centros de datos, no solo por su excedente energético, sino también por su estratégica ubicación geográfica y la disponibilidad de terrenos amplios. La inversión prevista de Microsoft en centros de datos podría contribuir con 264 millones de euros al PIB de Aragón y generar más de 2.100 empleos entre 2026 y 2030. Por su parte, Blackstone planea una inversión de aproximadamente 7.500 millones de euros en la región.
Sin embargo, el aumento proyectado en el consumo eléctrico, que podría alcanzar un 128%, genera interrogantes sobre la capacidad de las fuentes renovables para abastecer a estas instalaciones. Según el plan energético de Aragón, se estima que en 2030 los centros de datos representarán más de la mitad de la electricidad necesaria en la comunidad, lo que representa un gran reto para la sostenibilidad y el suministro energético.
Adicionalmente, se prevé que, a pesar del aumento en el consumo por parte de los centros de datos, otros sectores como el transporte, el residencial, el comercial y la agricultura experimentarán reducciones en su consumo eléctrico gracias a la implementación de sistemas más eficientes y el aumento del uso de energías renovables. El uso de combustibles fósiles, por su parte, se espera que disminuya considerablemente, alineándose con los objetivos de sostenibilidad de la región.
Con estos cambios, el Gobierno de Aragón espera que la proporción de energía renovable en la región aumente un 20,9% para 2030, aunque la dependencia de la red eléctrica seguiría siendo significativa. La clave estará en si los incrementos en la generación de energías renovables pueden satisfacer las necesidades energéticas de los nuevos centros de datos, especialmente durante los picos de consumo.