El Leapmotor B10 busca revolucionar el mercado con tecnología LiDAR en coches eléctricos asequibles

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El Leapmotor B10 busca revolucionar el mercado con tecnología LiDAR en coches eléctricos asequibles

El Leapmotor B10 se presenta como un revolucionario vehículo eléctrico, introduciendo la avanzada tecnología LiDAR para ofrecer una opción accesible en el mercado.

Descripción

Recientemente, el Leapmotor B10 ha sido presentado con el objetivo de convertirse en el coche eléctrico más asequible que incorpore tecnología LiDAR, un avance que está ganando terreno entre los fabricantes de automóviles chinos, como BYD y XPeng, quienes ya han integrada este tipo de sensores en varios de sus modelos para la detección y asistencia en la conducción.

Tradicionalmente, los sistemas semi-autónomos combinan radares, cámaras de alta definición y sensores ultrasónicos, a los que se les está sumando cada vez más la tecnología LiDAR. Marcas como Volvo y Mercedes-Benz han comenzado a incorporar estos sensores; en el caso de Volvo, se han utilizado en los modelos ES90 y EX90, mientras que Mercedes-Benz ha anunciado que incluirá sensores de LiDAR en sus futuros vehículos, provenientes del fabricante chino Hesai.

En contraste, Tesla ha decidido adoptar un enfoque diferente para reducir costos, optando por un sistema denominado Tesla Vision que se basa exclusivamente en cámaras. Esta decisión ha generado críticas entre expertos, ya que las cámaras tienen limitaciones en comparación con sistemas que integran LiDAR y radares. De hecho, la marca ha experimentado con la supresión e introducción de radares en sus vehículos, incluyendo modelos ya existentes.

Un análisis realizado por el youtuber de ingeniería Mark Rober evidencia los problemas del enfoque de Tesla. En una serie de pruebas, el Model Y, que depende únicamente de cámaras, presenta un rendimiento deficientemente bajo en condiciones adversas. Aunque puede detenerse ante un maniquí de un niño en movimiento o al ser cegado por luces, no logra detectarlo en niebla o lluvia intensa, donde el LiDAR demuestra su superioridad. Lo más revelador fue una prueba en la que el Model Y terminó chocando contra una pared simulado una carretera, un fallo que no afecta a vehículos equipados con radar o LiDAR.

A pesar de estos desafíos, Tesla tiene planes ambiciosos para el futuro, incluyendo el lanzamiento de un robotaxi autónomo, conocido como Cybercab, y un sistema de carsharing autónomo similar al de Waymo (Google) para 2026/2027. Sin embargo, algunos analistas cuestionan si estos anuncios son maniobras para desviar la atención de la creciente competencia de los fabricantes chinos en el desarrollo de vehículos eléctricos inteligentes.

Un aliado clave para Tesla podría ser la administración de Donald Trump, que está trabajando en una legislación más flexible en materia de conducción autónoma, lo que podría facilitar el lanzamiento de sus servicios. No obstante, los actuales usuarios del Autopilot y del sistema FSD (Full Self-Driving) son conscientes de que la compañía aún está muy lejos de ofrecer una experiencia de conducción completamente autónoma.