La llegada de las tarjetas gráficas NVIDIA RTX 5000 genera escasez de stock y precios elevados

Las tarjetas gráficas NVIDIA RTX 5000 han provocado una alta demanda, enfrentando a los consumidores a escasez de stock y precios elevados.

Las nuevas tarjetas gráficas NVIDIA RTX 5000 han llegado al mercado, con las potentes RTX 5080 y 5090 liderando la oferta. Sin embargo, la disponibilidad es un problema significativo; el stock es insuficiente y esto ha llevado a precios elevados y largas esperas para los consumidores interesados en actualizar su hardware.

Ante esta escasez de stock, muchos han comenzado a considerar ordenadores premontados como una alternativa viable para hacerse con las últimas tarjetas gráficas. Un ejemplo destacado es el CoolPC Gamer XVI, que incluye la RTX 5080, un procesador AMD Ryzen 7 7800X3D, 32 GB de RAM y un SSD de 2 TB. Este equipo se ha vuelto popular entre los entusiastas de los videojuegos que buscan un rendimiento de alta gama sin tener que esperar por los componentes individuales.

El CoolPC Gamer XVI ha visto su precio reducido a 2.899,95 euros, lo que, aunque representa una inversión considerable, ofrece a los usuarios la oportunidad de acceder a tecnología de última generación. Los modelos RTX 5000 son conocidos por su capacidad de proporcionar un alto rendimiento en juegos, permitiendo a los jugadores disfrutar de la máxima calidad gráfica y altas tasas de fotogramas por segundo, lo que mejora significativamente la experiencia de juego.

En definitiva, la llegada de las RTX 5000 parece estar generando un fenómeno similar al que se vivió con las RTX 3000 hace unos años; la búsqueda del hardware más avanzado lleva a los jugadores a buscar alternativas que les aseguren un acceso inmediato, aunque a un costo superior.