Qualcomm y Google extienden el soporte de actualizaciones de Android a ocho años para dispositivos con Snapdragon
Qualcomm y Google presentan una innovadora iniciativa que promueve hasta ocho años de actualizaciones para smartphones con procesadores Snapdragon, transformando el panorama del soporte Android.
Qualcomm ha anunciado que los smartphones equipados con los procesadores Snapdragon 8 y 7 recibirán ocho años de soporte de actualizaciones si utilizan Android, una iniciativa que cuenta con la colaboración de Google. Pero, ¿qué implica exactamente este compromiso? La actualización puede referirse a diversos aspectos del software que corre en los dispositivos móviles, incluyendo las actualizaciones de sistema operativo, parches de seguridad y mejoras en las aplicaciones.
Las actualizaciones de Android tendrán tres formas principales: actualizaciones de la plataforma, actualizaciones de seguridad mensuales y soporte para versiones antiguas. La promesa de Qualcomm incluye la disponibilidad de actualizaciones de plataforma, lo que significa que, por ejemplo, un teléfono como el OnePlus 13 que actualmente corre Android 15, podría recibir la actualización a Android 23 dentro de ocho años. Aunque este último podría no ofrecer todas las funcionalidades de Android 23, sí permitirá ejecutar las mismas aplicaciones que los dispositivos más recientes en 2033.
Además, Qualcomm se compromete a proporcionar las actualizaciones necesarias para el Kernel Común de Android para cumplir con este soporte de ocho años. Esto asegurará que tanto la plataforma como el software de seguridad se mantengan actualizados y sean seguros, independientemente de la versión de Android que utilicen los usuarios, siempre que su dispositivo esté basado en un chipset Snapdragon 8 o 7.
Aunque este compromiso de Qualcomm suena prometedor y beneficioso para la sostenibilidad de los dispositivos, existe una advertencia significativa: el soporte no será gratuito. Esto podría influir en las decisiones de los fabricantes de teléfonos al considerar la implementación de este soporte a largo plazo, dado que los costos adicionales por el soporte técnico son un factor que muchas empresas ya están negociando, como lo hace Apple.
Por ello, aunque algunos modelos de gama alta, como el Galaxy S25 Ultra, podrían recibir el apoyo de ocho años, es probable que muchos teléfonos de gama media equipados con procesadores Snapdragon 7 no obtengan el mismo nivel de soporte. La actual política de soporte suele estar contemplada en los acuerdos de compra entre los fabricantes y Qualcomm, y, debido a los costos que esto conlleva, las marcas podrían optar por no extender el soporte más allá de lo ya prometido.
En conclusión, aunque la iniciativa de Qualcomm es un paso positivo hacia una mayor sostenibilidad en el ámbito de los teléfonos inteligentes, depende en gran medida de las decisiones económicas de los fabricantes, quienes podrían no estar dispuestos a invertir en un soporte prolongado para todos los modelos. La realidad es que, aun con mejoras significativas en el soporte de actualizaciones, la obsolescencia de la batería y otros factores económicos podrían limitar los beneficios reales a largo plazo para muchos usuarios.