De 2008 a 2016, el sector de las telecomunicaciones ha sumado 1.711 empresas nuevas en el país, hasta contabilizar un total de 5.525 compañías a 1 de enero de 2016. El 93% de estos grupos está afincado en Madrid y Barcelona.
El 93% de los consejeros delegados de la industria está convencido de que su negocio crecerá el año que viene. Por otra parte, cinco de cada diez directivos quiere aumentar su equipo, una de las tasas más elevadas en los últimos veinte años.
El número de afiliados en el sector de las telecomunicaciones se situó en 76.468 personas, a la vez que el paro general registró uno de sus mayores descensos en los últimos ocho años, hasta 3,7 millones de desempleados.
Desde 2008 hasta 2016, el número de trabajadores del sector de las telecomunicaciones se ha reducido un 16%. Durante el mismo periodo, la tasa de empleadas se ha reducido del 36% al 28%.
La nueva asociación, en la que figuran grupos como Telefónica, Orange, Vodafone, Ericsson, Nokia, Euskaltel o ZTE, se llamará DigitalES y se constituirá de forma oficial en las próximas semanas.
El gigante tecnológico y los operadores de telecomunicaciones lanzarán un sistema de mensajería instantánea para smartphones Android. Previsiblemente, el servicio estará disponible a partir de verano.
En su conjunto, las compañías dedicadas a los servicios de información y comunicaciones mantuvieron la tendencia alcista de los últimos meses y aumentaron su cifra de negocio un 4,6% a principios de año.
Movistar, Vodafone o Orange podrán acceder al segundo dividendo digital dentro de tres años, frecuencias que usarán para prestar servicios relacionados con la tecnología 5G. Las televisiones, por su parte, quieren retrasar la entrega lo máximo posible.
A lo largo de los últimos nueve años, el número de trabajadores del sector se ha reducido en 26.011 personas. En paralelo, los costes por percepciones no salariales han llegado a representar el 35% del coste laboral total.
La unión entre Vodafone y el grupo indio permitirá a ambas empresas controlar el 35% del mercado asiático, contar con una base de 400 millones de usuarios y desbancar de su liderazgo al grupo Bharti Airtel.
La asamblea general ha rechazado la modificación estatutaria que habían propuesto una veintena de grandes grupos para hacerse con el 50% de los votos.
La fusión entre ambas compañías de telecomunicaciones tendría como resultado un grupo con amplia presencia en el norte de España.