Valentin Stalf (N26): “Lo que hacemos no es ningún secreto, pero lo ejecutamos más rápido”
El fundador y consejero delegado del banco móvil alemán considera que allí donde N26 tiene sus ventajas es precisamente donde las grandes entidades tienen mayores dificultades para transformarse.
La banca móvil quiere poner en jaque a la banca tradicional mediante su capacidad para innovar más deprisa y crear experiencias de usuario personalizadas. “Usamos tecnología moderna, no tenemos una red de sucursales y tenemos mano de obra digital, que entiende cómo debe ser un producto de estas características”, explica Valentin Stalf, fundador y consejero delegado del banco móvil alemán N26, a Kippel01. “Lo que hacemos no es ningún secreto, pero lo ejecutamos más rápido y mejor”, apostilla.
Según el directivo, para los actores tradicionales supone “un gran reto” transformarse en un banco online, sobre todo si llevan décadas operando. “Ahí es donde está nuestra ventaja y ahí reside la dificultad de las grandes entidades a la hora de afrontar su transformación”, señala. A ello se suma la independencia que han logrado adoptar las start ups del sector financiero. “Crecemos a más de 5.000 usuarios por día y tenemos un millón y medio de clientes, lo que demuestra nuestra independencia”, remarca Stalf.
N26 avanza en una curva de crecimiento ascendente. El banco móvil, fundado en Berlín en 2013, acaba de inaugurar su segundo hub tecnológico europeo en Barcelona, que se convertirá en uno de los más importantes para la compañía. Es un espacio de coworking dedicado plenamente al desarrollo tecnológico, con mucho foco en la parte funcional del producto, y que estará ocupado por doscientas personas a finales de 2019.
N26 acaba de estrenar su ‘hub’ en Barcelona, donde espera tener 200 empleados a finales del próximo año
Stalf no descarta que N26 busque una nueva oficina a la que trasladar a dicha plantilla una vez alcancen su objetivo de contratación (ahora mismo es de diez nuevos empleados cada mes). El directivo ve que Barcelona guarda algunos paralelismos con Berlín en cuanto a calidad y estilo de vida, la presencia de perfiles jóvenes y talento, y la actividad emprendedora. “Es un escenario maduro con un gran ecosistema”, opina.
¿Son muy diferentes los consumidores españoles de los alemanes? Para el consejero delegado de N26, “los usuarios españoles, desde el punto de vista de mentalidad, son aún más digitales que los alemanes”. El directivo considera que en España “hay una mente más abierta, especialmente si hablamos de métodos digitales de pago o de banca móvil”. Ello se contrarresta con la presencia de “grandes bancos que innovan poco y que guardan mucha distancia con la era digital”, apunta.
Las intenciones de N26 para con España son ambiciosas. De momento, la empresa ya tiene 100.000 usuarios en el país y confía en disponer de un millón de clientes a finales de 2020, tal y como explicó Francisco Sierra, responsable de N26 en España, a Kippel01 el mes pasado. Asimismo, la compañía prevé ofrecer productos de terceros mediante su aplicación para entonces, a la vez que exploran su expansión a nuevos territorios.
¿Latinoamérica o Asia?
N26 opera actualmente en dieciocho mercados europeos y entrará en Estados Unidos en el primer trimestre del próximo año. De hecho, la empresa ya dispone de una oficina en Nueva York desde principios de 2018 en la que se está desarrollando toda la estrategia para hacer posible el desembarco del servicio. Los próximos planes del banco móvil pasan por abordar nuevos territorios fuera de Europa y Estados Unidos.
Stalf explica que la compañía “irá a un par de nuevos mercados que, de momento, no se han terminado de decidir, puede ser en Asia o en Latinoamérica”. N26 comenzó como un proyecto para Alemania, que se convirtió en un proyecto europeo. “Ahora sabemos que hay consumidores en todo el mundo que no están contentos con las soluciones de los grandes bancos, así que seguiremos creciendo”, afirma el ejecutivo.
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