Telefónica, cara y cruz en la TV de pago: ingresa un 13% más pero pierde 164.600 abonados desde la compra de Canal+
La plataforma de Telefónica ingresó 843,93 millones de euros en el primer semestre de 2017 a través de sus servicios de televisión de pago, lo que representa el 81% de los ingresos totales. El grupo ultima un acuerdo con Netflix para integrar sus contenidos en Movistar+ en 2018.
La renovación del contrato con la Fórmula 1, la retención de la NBA y MotoGP, la inversión de diez millones de euros en La Peste y la futura integración de los contenidos de Netflix en Movistar son algunas de las operaciones que reflejan la apuesta de Telefónica por la televisión de pago, un negocio que desde que adquirió Canal+ a mediados de 2015 ha elevado un 13% sus ingresos.
El 30 de abril de 2015, Telefónica formalizó la compra del 56% del capital de Canal+ a Prisa, una operación cuyo importe inicial se cifró en 707 millones de euros. La integración de la oferta de la compañía en la parrilla de Movistar se tradujo en unos ingresos de 370,03 millones de euros en el segundo trimestre de 2015, según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (Cnmc).
Dos años después, en el segundo trimestre de 2017, Telefónica ingresó 420,79 millones de euros a través de su negocio de televisión de pago, lo que representa un incremento del 13% en comparación con el mismo periodo de 2015. Con la compra de Canal+ (formalmente Distribuidora de Televisión Digital), Movistar pasó a copar el 26% de los ingresos totales de la televisión de pago a cierre de 2014 a acumular el 84% de estos en 2015.
Movistar ha perdido más de 160.600 clientes entre 2015 y 2017
En ese mismo periodo, Movistar ha perdido un 4% de los abonados que tenía tras cerrar la operación de compra de Canal+. Si en el segundo trimestre de 2015 el grupo contaba con un total de 3,81 millones de clientes, según la Cnmc, este dato se ha reducido en 164.616 clientes en el segundo trimestre de 2017, hasta un total de 3,65 millones de usuarios.
La integración efectiva de Canal+ en la plataforma de Movistar, no obstante, no se produjo hasta julio de 2015. Y el cambio se hizo patente. Para empezar, Telefónica potenció su oferta convergente Fusión frente al servicio Movistar+ por satélite, cuya contratación partía de una cuota inicial de cien euros y una tarifa mensual de 25 euros. Fusión, no obstante, contaba con la cuota de alta gratuita y una tarifa mensual de cinco euros.
El canal de Canal+, por otro lado, perdió parte de su valor tras la separación en paquetes de Canal+ Series y Canal+ Estrenos, que podían ser contratados con una tarifa aparte. Este también perdió el partido semanal de LaLiga. La estrategia de fragmentación de Telefónica vino condicionada por las condiciones impuestas por la Cnmc en relación a la aprobación de la compra de Canal+, que explicaba que “cada operador de televisión de pago podrá acceder a un máximo del 50% de los canales que integran la oferta mayorista [de Telefónica] y tienen libertad de elegir cómo componen su elección dentro de esta oferta mayorista”.
El grupo planea la integración de los contenidos de Netflix en Movistar+
El efecto de la integración no se hizo esperar. A cierre de 2015, Movistar había perdido 69.876 abonados, que se repartieron entre Vodafone, Orange y Euskaltel. El descenso del número de clientes de televisión de pago, de hecho, se fue repitiendo hasta que, en el segundo trimestre de 2017, la compañía española consiguió romper con seis trimestres consecutivos de fuga de clientes.
A cierre de junio de 2017, Movistar copaba el 59% de abonados de la televisión de pago, con un total de 3,65 millones de usuarios. Vodafone, por su parte, contabilizó 1,30 millones de usuarios, un 21% sobre el total; y Orange alcanzó 528.932 clientes, lo que representa un 8% sobre el total de usuarios de televisión de pago.
El próximo paso de Telefónica para retener esta masa crítica de usuarios es conseguir la integración completa de los contenidos de Netflix en Movistar+, lo que permitiría a sus usuarios acceder a las producciones de la plataforma de streaming sin tener que pasar por la aplicación del grupo estadounidense.
El acuerdo, que está pendiente de firma, ratificaría las palabras de José María Álvarez-Pallete en la última cumbre de directivos celebrada el pasado diciembre. “Ahora somos una compañía abierta a distribuir productos de otras empresas, que pone su plataforma de distribución al servicio de toda esta gama de productos que van a ser buenos para las personas y las empresas que sepan utilizarlo bien”, aseguró el presidente de Telefónica, según recoge El Español.