BQ, suma y sigue: el grupo engorda su negocio en España con cuatro nuevas filiales

BQ pone los puntos sobre las íes y reestructura su negocio en España. La compañía acaba de constituir cuatro nuevas filiales en el país, cada una de ellas especializada en un área concreta, con las que el grupo delimita el ámbito de actuación de cuatro nichos concretos: educación, impresión 3D, atención al cliente y programación. La creación de estas cuatro nuevas subsidiarias se suma a la constitución de una primera filial destinada a ofrecer servicios a terceros, tal y como explicó la empresa a Kippel01.

Si bien la mayor parte del negocio de BQ procede de la venta de terminales móviles, la empresa ha ampliado sus miras para sumar nuevos proyectos del ámbito digital en los últimos años. En este contexto, y tal y como consta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil, BQ ha constituido cuatro subsidiarias nuevas, de las que Mundo Reader (sociedad que opera con la marca BQ) ejerce como socio único. Todas ellas ubican su sede en Madrid, empezaron a operar a mediados de marzo y tienen a Alberto Méndez, cofundador y consejero delegado del grupo, como administrador único.

La primera de ellas llamada Deep Technologies&Engineering Services, tiene como objeto social el “diseño, desarrollo de productos incluyendo las actividades de mecánica, programación y testing de calidad”. La segunda filial lleva esta apuesta por la programación a otro nivel y la pone en manos de los niños.

BQ ha sellado un acuerdo con Makeblock España para integrar sus robots en la plataforma Bitbloq

En concreto, la sociedad Educación y Robótica está especializada en el desarrollo y en la investigación tecnológica, y tiene como objeto social “generar contenido didáctico e impartir formación en los campos de la ingeniería y la robótica”. En este sentido, BQ acaba de sellar un acuerdo con Makeblock España para integrar sus robots en Bitbloq, una plataforma de programación por bloques.

Según la compañía, el principal objetivo del acuerdo de colaboración es potenciar el uso de la tecnología en las aulas españolas. “La robótica y la programación tienen un impacto muy positivo en la creatividad de los más pequeños, por eso queremos que cualquier niño con cualquier robot pueda utilizarla”, explicaba Alberto Valero, director de BQ Educación, en un comunicado.

Además de entrar de lleno en el sector de la educación tecnológica, la compañía española también ha constituido otras dos filiales: una llamada Contact for services satisfaction, que se dedicará a las actividades de telemarketing y televenta, así como servicios de estadística, encuestas, cuestionarios y consultas selectivas; y otra sociedad, 3D Printing&Printers, bajo la que BQ engloba su negocio de impresoras 3D.

La empresa colabora con varios hospitales para llevar la impresión 3D a las intervenciones quirúrgicas

En este último vertical, la empresa cuenta con varios proyectos en cartera, entre los que destacan el uso de esta técnica en el campo de la sanidad, con colaboraciones con el Hospital Gregorio Marañón de Madrid o el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla para intervenciones quirúrgicas.

El pasado abril, la empresa ya inició la reorganización de su estructura societaria con la constitución de Iot&Mobility Commerce, que en este caso se refería a una nueva área con la que BQ ha empezado a brindar nuevos servicios a terceros y a colaborar con otras empresas para lanzar nuevos proyectos.

BQ España, en cifras

Según las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil, BQ cerró el ejercicio fiscal 2015 con una cifra de negocio de 224,5 millones de euros, de los cuales 186,9 millones de euros correspondían a la venta de terminales móviles.

En cuanto a su beneficio, la compañía registró ganó 3,69 millones de euros, sólo un 3% más en comparación con el año anterior. En los últimos meses, además, la empresa ha cortado lazos con Movistar y Fnac, pese a que ha intentado compensarlo con acuerdos con El Corte Inglés, Carrefour, Worten o Eroski, entre otros.

Según los últimos datos de Kantar Worldpanel, BQ se erigió como el tercer fabricante de móviles con un mayor número de smartphonesen España en 2016. Con una cuota de mercado del 12%, la empresa española quedó por detrás de Samsung, que controlaba el 24%, y Huawei, con una cuota del 21%. BQ es la única compañía local que aparece en el ránking realizado por la consultora.

Los inicios

BQ empezó, como todas las compañías, con un negocio adecuado a su tamaño: vendiendo dispositivos USB en las universidades españolas. Era 2005 y los jóvenes Alberto Méndez, Rodrigo del Prado (actual consejero delegado), David Béjar, Ravín Dhalani, Adán Muñoz e Iván Sánchez empezaban a dar sus primeros pasos en el campo del emprendimiento con sus pendrives personalizados a través de la compañía Star TIC Innovation.

Con los años, el grupo fue incorporando nuevos socios, como Antonio Quirós (de la editorial Luarna Ediciones), lo que les llevó a zambullirse en el mundo de los ebooks. Pero, en plena eclosión de los libros electrónicos y con Amazon haciéndoles frente con el Kindle, los fundadores entendieron que tenían que avanzar en alguna dirección para darle sentido a su dispositivo y se adentraron en la industria de los smartphones de la mano de Movistar.