La tecnológica catalana ha convocado una junta de accionistas para el próximo 29 de octubre con el objetivo de dar el salto al Euronext Growth. De llevar a cabo este movimiento, se convertiría en la única empresa del MAB que cotice en ambos mercados a la vez.
El grupo español cuenta con un total de 172 tiendas Movistar en la región, cien de las cuales han sido renovadas. El grupo inició este proceso de remodelación a finales de 2015.
La subsidiaria arranca con 120 personas en plantilla que se dedicarán a proporcionar soluciones de comunicaciones, privacidad y digitalización. Esta plataforma de servicios está abierta a terceros proveedores.
El operador de telefonía ofrece tres meses gratuitos para los clientes fijos y móviles de Vivo. El precio del servicio será de 14,90 reales (tres euros) y los usuarios podrán realizar el pago de la suscripción desde su factura mensual.
Polina Montano, cofundadora y directora de operaciones de la empresa, ha explicado que su equipo trabaja en nuevas soluciones de pago para empresas. Asimismo, la directiva proyecta la entrada de la compañía en nuevos mercados, como Estados Unidos.
La empresa tecnológica ha pagado 13.100 millones de euros en concepto de los favores recibidos y otros 1.200 millones de euros adicionales de intereses.
Laurent Paillassot, responsable de la compañía en España, ha afirmado que el nuevo negocio será una subsidiaria del banco galo. Su llegada ha sido aplazada en varias ocasiones.
La firma hongkonesa Sailin Capital y el Fondo de Cooperación Económica China-Eurasia han respaldado a la empresa, que ha elevado su valoración a cerca de 4.300 millones de dólares.
La empresa española cuenta con accionistas como las firmas de capital riesgo Kibo Ventures y Venturecap, así como el vehículo inversor de Bankinter. En 2017, la compañía dobló sus ingresos, hasta 3,1 millones de euros.
La start up, que nació en el seno de Nuclio Venture Builder, ha captado 550.000 euros en una operación a la que han asistido Forcadell, el inversor Dídac Lee, Civeta Investment y el inversor Carlos Blanco.
La empresa española ha resultado adjudicataria, a través de su filial chilena, de un nuevo contrato por parte del grupo de telecomunicaciones Entel Chile. El importe del contrato asciende a 22,7 millones y tiene un plazo de tres años.
Los activos de la operadora británica están valorados en 12.000 millones de euros, según las estimaciones de Barclays. El grupo posee un total de 110.000 torres en la región, de las que controla de forma directa la mitad.
La empresa catalana, especializada en atención domiciliaria, ha incorporado a su equipo a Fernando Villar, ex director de tecnología de Waynabox y anteriormente programador en Atrápalo.
La empresa aeroespacial se ha volcado en indexar los cambios producidos en la Tierra con métodos de aprendizaje automático. En paralelo, trabaja en un proyecto europeo de observación del planeta dentro del Programa Copérnico.
La compañía estadounidense pagaría un precio de entre 2.000 millones y 2.500 millones de dólares (entre 1.719 millones y 2.150 millones de euros) por su rival. De momento, no hay ningún acuerdo en firme.
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